Entre todos los tíos que podía elegir su hija...
¿Tenía que ser él?
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Título original | Why Him? |
Nacionalidad | Estados Unidos de América |
Año | 2016 |
Género | Comedia |
Formato | Color |
Duración | 111 |
Director | John Hamburg |
Guión | John Hamburg, Ian Helfer |
Fotografía | Kris Kachikis |
Música | Theodore Shapiro |
Producción | 20th Century Fox |
Reparto | Bryan Cranston, James Franco, Zoey Deutch, Megan Mullally, Griffin Gluck, Keegan-Michael Key, Andrew Rannells, Zack Pearlman, Adam DeVine, Cedric the Entertainer, Kaley Cuoco, Jacob Kemp, Steve Aoki, Gene Simmons, Paul Stanley, Elon Musk |
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Sinopsis | Durante sus vacaciones, Ned, un padre sobreprotector y su familia visitan a su hija en la Universidad, donde conocerán a su mayor pesadilla: su novio, Laird, un multimillonario de Silicon Valley bien intencionado pero socialmente bastante complicado. El conservador Ned, piensa que Laird es la pareja menos apropiada para su hija. La rivalidad unilateral y el nivel de pánico de Ned se disparan cuando descubre además que Laird está a punto de hacerle a su hija “la pregunta”.
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Crítica | Puntuación del crítico: 6 | Bryan Cranston. James Franco. Menudo dúo ¿eh? Dos de los mejores actores que nos podemos encontrar en la actualidad, tanto en cine como en televisión (cada uno moviéndose habitualmente en uno u otro medio), juntos en una comedia gamberra donde el enfrentamiento entre ambos es, en realidad, el protagonista principal de la historia, un duelo tanto actoral como físico. La fórmula no es nueva, por supuesto, y podría poner cientos de ejemplos cinematográficos de parejas parecidas que se han "partido la cara" en comedias más o menos parecida y por los mismos motivos, o más o menos los mismos. Es más, sin irnos demasiado lejos, tenemos el mismo concepto, o al menos uno muy similar, en los filmes de colegas que se llevan bien y mal al mismo tiempo, digamos "Arma Letal", digamos "Hora Punta", digamos "Shangai Kid", digamos... Bueno, supongo que la idea está clara. Este tipo de producciones (las comedias, no las buddy movies de acción mezcladas con ciertos toques cómicos) suelen tener mayor éxito cuando más grande es el enfrentamiento entre los protagonistas, y quizás ese es el principal problema de "¿Tenía que ser él?", que a pesar de intentar ser muy, muy gamberra y políticamente incorrecta, se queda a medio gas, curiosamente, como muchas otras comedias de este estilo desde hace unos pocos años, siendo "Padres por desigual" el mayor ejemplo de ello, donde padre y padrastro luchaban por el amor de la misma familia. Ahora, es el turno del padre de la chica en cuestión y su nuevo novio, que no es precisamente el chico más equilibrado que uno se pueda encontrar.
Lo cierto es que la trama de "¿Tenía que ser él?" se acerca mucho, a veces demasiado, a "Adivina quién" de Ashton Kutcher, y en este caso, además, ya era un remake, así que podéis imaginar que el guión no es lo mejor que vamos a encontrar en el filme, aunque ni falta que hace en una comedia de estas características, a la que no le falta una estructura más que conocida y una fórmula de ABC que se sigue al dedillo, sin sorpresas ni giros argumentales que nos sorprendan. ¿Esto es algo bueno? ¿Es algo malo? Bueno, tengamos en cuenta que todos los géneros, desde el romántico hasta el terror, navegan siempre por estructuras bastante parecidas entre sí, y aunque no es siempre de esta forma, sí hay una gran infinidad de títulos que lo hacen. "¿Tenía que ser él?" es de esos, y sólo se diferencia de "Adivina quién", que pocos recordarán hoy día (paso sin apenas pena ni gloria), en que el tema racial no es el problema entre suegro y yerno, sino, en este caso, las formas del segundo, un tipo demasiado moderno, que no deja de soltar tacos, que se pasea medio desnudo por casa y que se muestra demasiado cariñoso con su nueva familia política. Todo un choque de trenes teniendo en cuenta el carácter más conservador del personaje de Cranston, y sobre todo, lo que supone que esté perdiendo su negocio por los nuevos modelos que da Internet, la fuente de la riqueza del personaje de Franco, quien es en realidad uno de esos nuevos millonarios que nacen desde Silicon Valley.
Si uno tiene en cuenta que "¿Tenía que ser él?" es lo que es, la diversión está garantizada, aunque sea a niveles mínimos. Es una cinta entretenida, con algún que otro momento tronchante, buenos secundarios e insisto, el simple hecho de que Franco y Cranston compartan pantalla ya es razón suficiente para echarle un vistazo a la película, en especial, si somos seguidores de ambos actores. Es evidente, sobre todo después de disfrutar de "Breaking Bad", que Cranston se encuentra aquí en uno de esos trabajos alimenticios y divertidos que un actor maduro coge de cuando en cuando, tanto para pasárselo bien sin presiones actorales de ninguna clase como para ganar dinero fácil, dándonos, aun así, momentos realmente descacharrantes, como al intentar usar el retrete, la pelea final con el personaje de Franco, los primeros minutos con éste o su encuentro con los Kiss, una de las grandes sorpresas del filme, y uno de esos valores que la hacen un visionado interesante también para quienes somos fans del popular grupo musical de rock. También hay que entender que Cranston tiene el papel más serio de la pareja protagonista, por lo que no es extraño que Franco desfase desde los primeros segundos en el que lo conocemos, con esa vídeollamada a su novia o ese culo en primer plano para comenzar como nunca la relación con su suegro. Además, la estrambótica vida del personaje da para mucho, sobre todo si hablamos de secundarios interesantes o esas manías con las que choca el personaje de Cranston, como lo de no tener ni un solo papel en casa, o el tipo de comidas que suele ingerir y que les sirve a su nueva familia política. Eso sí, la palma se la lleva la relación que tiene con su "mayordomo" Gustav, interpretado por el divertido Keegan-Michael Key, que no es precisamente desconocido en el terreno de la comedia. Eso sí, grandes los cameos de Adam Devine y, especialmente, el de Kaley Cuoco, la Penny de "The Big Bang Theory", que aquí interpreta a Justine, una asistente muy... especial.
En conclusión, como auguraban sus trailers, "¿Tenía que ser él?" no es una de esas comedias que pasarán a la historia, e incluso es bastante olvidable una vez se termina, y eso es una lástima teniendo en ella a dos grandes de la interpretación como Bryan Cranston y James Franco, cada uno en su estilo. Le falta chicha, le falta mordiente, le falta más mala leche (y eso que la tiene en ciertos aspectos) y le sobra girar siempre sobre los mismos gags. Precisamente, cuando la historia se desvía de ellos y entra en terrenos diferentes a los de otras comedias similares como la mencionada "Adivina quién", o lo que es lo mismo, a comedias con líos familiares de por medio, concretamente, aquellas con los suegros y los yernos de por medio (ahí tenemos también la trilogía de "Los padres de ella" con Ben Stiller y Robert De Niro, mucho mejor resuelta, sobre todo sus dos primeras entregas). Sin embargo, no nos confundamos, porque la cinta da lo que promete, ni más ni menos, una producción divertida, entretenida, para pasar un buen rato sin nada más y, sobre todo, dirigida para aquellos fans de los actores protagonistas, el auténtico aliciente del filme. Insisto, no es que vaya a cambiar la historia de la comedia cinematográfica, pero merece la pena echarle un vistazo para disfrutar de una comedia tan ligera como olvidable.
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The Stranger | |
Ficha de Película enviada por The Stranger el 15 de Agosto de 2017 |
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