Corre el año 1991, y al veterano agente de la CIA Nathan Muir tan sólo le queda un día para retirarse cuando recibe la noticia de que aquel que fuera su discípulo, Tom “Boy Scout” Bishop, está en un buen lío. Hecho preso en una cárcel extranjera bajo la acusación de espionaje, Bishop ha sido hallado culpable y se prevé ejecutarlo en 24 horas. Temiendo un incidente de alcance internacional, la CIA decide que es muy arriesgado tratar de salvarlo.Así las cosas, todo depende de Muir. Habiendo toda una nueva generación al cargo de la Agencia, Muir, partidario de los antiguos métodos, está a punto de dejar de pertenecer a la organización que ha servido durante tantos años, y deberá hallar el modo de burlarla mientras batalla por conseguir más detalles acerca de la situación de Bishop. Muir había elegido especialmente a Bishop para el sector cuando el joven era un francotirador en Vietnam, y le enseñó todo cuanto sabía. Sin embargo, hace mucho que una desavenencia les distanció. Ahora, con el reloj marcando las horas, Muir recuerda vívidamente el pasado; todas las experiencias que compartieron por todo el mundo. Y mientras muestra a sus superiores el rostro profesional por última vez, rememora cómo reclutó al joven novato, cómo le adiestraba en el peligroso juego del espionaje, y se cruzaban con la mujer que hizo tambalear la operación y su amistad.
Crítica
Puntuación del crítico: 6
Correcto film de espionaje, hecho al servicio de sus dos protagonistas. Con un argumento que daba para una película de 90 o 100 minutos, el film (pese a todo) se puede ver y es entretenido, pero no deja de ser un producto más "made in Hollywood". Para pasar el rato sin complicaciones.
Oscar Ferrer by Dusk
Ficha de Película enviada por dusk el 27 de Octubre de 2003
Me gusto y me sorprendio está cinta, uno se esperaba ver otra producción para lucimiento del rubiales Brad Pitt pero lo cierto es que el verdadero protagonista es todo un clásico: Robert Refford,la falta de acción es suplida por una trama muy ilvanada que te mantiene tenso hasta el final, aunque este como en la mayoria de las historias del género es muy previsible.
partiendo de que me gusta bien poco el estilo Tony Scott la película tiene sus momentos entretenidos como los flashbacks de Berlín o Beirut, pero la película es como dices más larga de lo debido y el argumento principal, Robert Redford intentando ganar tiempo y apoyos para salvar a Pitt, me importaba una mierda.