Profunda disección de la institución marital
|
|
Sinopsis | El matrimonio formado por Johan, profesor de psicología, y Marianne, abogada, recibe una noche en su casa la visita de sus amigos Peter y Katerina. Al poco tiempo de estar juntos, sus amigos empiezan una fuerte discusión en la que Johan y Marianne intentan mediar, sin éxito alguno. Cuando se quedan solos, Johan y Marianne piensan en todo lo que a ellos les pasa, en su matrimonio que ya dura diez años.
| |
Crítica | Puntuación del crítico: 10 | Ufff no se por donde empezar... y tal vez no continue mucho más: es curioso porque para hablar de películas que me gustan pero que no llegan a apasionarme puedo tener infinita capacidad para enrollarme, pero a la hora de escribir sobre esas películas que me llegan muy adentro, que me encandilan, suelo bloquearme, me cuesta expresar mis sentimientos respecto a esa obra que me hizo tan feliz durante un puñado de minutos. No se si a algunos de vosotros también os pasa o si, al menos, me comprendeis. Por ello no voy (no podría aunque quisiese) a realizar un frio y meticuloso análisis cinematográfico, sino más bien a plasmar un conjunto, algo reducido, de impresiones.
Creo no recordar haber visto ninguna película que retrate de forma tan lúcida las relaciones humanas, o al menos las relaciones de pareja. No es un film complaciente, no hay moralina posible, no está dirigido (se que es un tópico) al intelecto sino al corazón. No es de esas obras intelectualoides que pretendan descubrir las claves de la existencia humana con diálogos ajenos al fragor de la vida; no pretende dilucidar sesudamente y de manera distante cual es el secreto de la alquimia de nuestros sentimientos. Es, meramente, un trozo de vida, de vida en pareja, que se nos presenta con toda su crudeza. No busca aleccionar al espectador, brindar fórmulas infalibles, en "secretos de un matrimonio" no hay ni vencedores ni vencidos, buenos y malos, porque la interacción humana es siempre complicada. Un auténtico y valiente ejercicio de veracidad y honestidad. Tal vez muchos criticarán su valor cinematográfico real ya que, al fin y al cabo, la peli no es más que una sucesión de diálogos filmados con planos fijos y larguísimos. Puede que tengán razón, pero yo solo se que durante más de dos horas y media he estado con la boca abierta, el oido agudizado intentando apresar cada palabra, emocionado, expectante, conmovido, identificado... simplemente feliz.
¡Y que decir de Liv Ullmann y Erland Josephson! ¡Formidables! ¡Maravillosos! En mi opinión son dos de los mejores interpretes que ha dado nunca el cine europeo (ahora no es momento de hablar de Pepe Isbert, jeje)
Por cierto, aprovecho para recomendar encarecidamente la (en mi opinión) también cojonudísima continuación natural, treinta años despues, "Saraband".
Ya se que lo que voy a decir puede sonar un poco ambiguo, incluso puede que ni yo mismo entienda lo que realmente quiero expresar, pero si hay algo que destacaría de "secretos de un matrimonio" es que una de las películas más HUMANAS que he visto en mi vida.
|
|
|
|
|
|
|
visitantes
|
|
|