Un joven empleado en unas cuadras deja ciegos a seis caballos de un amigo, y la justicia le pone en manos de un psiquiatra que descubre en él una rara enfermedad mental, derivada de una extraña devoción religiosa inculcada por su madre, que busca a Dios a través del espíritu de Equus.
Crítica
Puntuación del crítico: 9
Sobresaliente drama. Lumet nos introduce en la perturbada mente de un adolescente que ve en la figura del caballo a su auténtico Dios.
Es una de las mejores películas que he visto sobre la relación psicólogo/paciente ("El mundo de Leland", "Gente corriente", etc) y seguro que fue un buen refente para otras que vinieron después. La historia sobrecoge (como el niño se va desquiciando por los problemas en su casa, una madre fanática religiosa y un padre pusilánime) y las sesiones en el hospital son impagables (sobretodo cuando Peter Firth cuenta lo de sus salidas nocturnas con los caballos).
Firth lo borda sin duda en el mejor papel de su carrera y Richard Burton está impresionante, es una gozada verle comerse la cámara en los diversos monólogos que pronuncia.
La dirección de Lumet es, como siempre, admirable.
Davis
Ficha de Película enviada por DAVIS el 17 de Abril de 2007