Podría haber sido un gran film de no ser por lo hilarante de algunos situaciones, vamos, eso de que el niño mate a su madre porque quiere quemarle un rompecabezas de una tía en bolas!! Aghjajajajajaja! Tampoco queda muy claro que pinta el personaje de la reportera, ni tampoco queda claro como coño intenta la policia hacerse pasar por profesora de tenis cuando la reportera ya sabe que es policia? Jajajaja. Y lo del final es ya pa mear y no hechar gota, si no fuese por ese absurdo, horrendo y contranatura último plano no la suspendería.
Muy mala película, como todas las de J. P. Simon, penoso cineasta aficionado a piratear ideas ajenas y desmantelar géneros hermosos como el del cine de terror. Grotesco.