Hombre, es bastante mala, pero vale la pena verla por las interpretaciones de Elizabeth Hurley y Jeremy Sisto. La película recurre al mismo sistema narrativo que La mujer del teniente francés en la que se mezclan la vida cotidiana de los actores con las imagenes de la película, aunque las diferencias son notables ya que La mujer del teniente francés es una obra maestra y esta película no. Lo mejor las secuencias de los asesinatos, como el de la bañera.