Interesante y muy entretenida opera prima. Mola ver a un Brad Pitt desmadrado y violento. Un papel de esos "afeados" que necesitan los actores como Pitt en sus inicios, para quitarse la etiqueta de "cara bonita", buscando registros arriesgados (como el de "12 monos"). Juliette Lewis había hecho en el mismo año "Asesinos natos". En fin, una película que se deja ver muy bien y cuenta con varios momentos de humor negro.