Tercer trabajo conjunto y consecutivo de Danny Boyle, John Hodge e Ewan McGregor y en suma el más decepcionante. Es una divertida comedia romántica en la que el estilo visual de Boyle y su excelente uso de la música están presentes. De todos modos, aún siendo una propuesta entretenida en la que vuelve a brillar Ewan McGregor, no tiene toda la mala leche que me esperaba. Con un poco más de humor negro (como el de la magnífica "Tumba abierta") hubiera estado mucho mejor. Para pasar el rato.