Estupenda y olvidada. La mejor película de Paul W.S. Anderson, es un duro e impactánte retrato de la juventud sin esperanza, los marginados, cuya única forma de vida se reduce a delinquir y luchar contra la autoridad. Escalofriantes escenas del padre de Billy ignorando a su hijo que acaba de salir de prisión y el contundente final.
Jude Law se defiende muy bien en su debut cinematográfico. Una promesa desde aquel instante y que en diez años de carrera se ha convertido en el mejor actor de su generación y uno de los mejores del momento.
La película tiene 20 minutos censurados en la versión americana. Ni que decir que recomiendo la íntegra.