En plena guerra fría un agente de la CIA, Michael Nordstrom, ayuda a un científico ruso y a su familia a huir de la Unión Soviética. Durante el interrogatorio los americanos averiguan que hay un doble agente que trabaja para la OTAN y que al mismo tiempo facilita secretos de estado a los rusos. Aunque se sospecha de quien puede ser el traidor su identidad exacta continúa en secreto y sólo se conoce el nombre en clave de su organización: TOPAZ. Al mismo tiempo Nordstrom averigua que los Soviéticos están creando un arsenal nuclear en la Cuba de Fidel Castro, por lo que envía a la isla a un agente Francés destinado en Washington, André Deveraux para que obtenga más información con la ayuda del revolucionario cubano Rico Parra y de Juanita de Córdoba, la hija de un heroe de la revolución que se ha pasado al enemigo y que mantiene un idilio con el agente Francés. Con la pruebas que demuestran que en Cuba hay misiles nucleares Soviéticos Deveraux debe trasladarse a Francia, donde no podrá comunicar los resultados de sus investigaciones hasta que desenmascare a Topaz...
Crítica
Puntuación del crítico: 6
Una pelicula que claramente estuvo gafada y de la que el maestro siempre renego debido a la complejidad de la trama que acaba liando al espectador e incluso al propio director, el cual se vio obligado a rodar diferentes finales y escenas para solucionar malamente un embrollo de pelicula total. La unica escena a destacar es la muerte de Juanita de Cordoba lo demas no vale la pena. No esta a la altura de el resto de las del maestro.
Dominik
Ficha de Película enviada por dominik el 11 de Junio de 2005
Sólo quiero unirme al coro de voces que elevan el asesinato de Juanita de Cordoba a los altares del séptimo arte, uno de los mejores de la historia del cine.
No me parece la peor ni mucho menos de Hitch (pestiños como Posada Jamaica así lo demuestran). Y ya solo con el asesinato de Juanita de Córdoba, el mejor para mi de la historia del cine supera con creces cualquier película entera rodada ahora. Está genialmente estructurada en planos y el cenital con la falda de Juanita dando giros (se atarón hilos y se tiraron de ellos) y con el suelo con dibujo de tablero de ajedrez resulta algo tremendamente poético incluso para el global de la pelícola. Se nota la ausencia de sus míticos colaboradores, y el guión es un lío total, como bien dice Dominik. La Música de Maurice Jarre, con todos mis respetos hacia él, es cutre de narices, y no pega nada con la atmósfera de la película -Herrmann fliparía al escucharla.
P.S.: Karin Dor es morena pero También está buena.