Es una lástima que debido a la crisis del cine italiano en los últimos años se haya paralizado casi por completo la producción de cine fantástico en un país con una gran tradición en el género (aunque casposa y derivativa en su mayoría, eso sí), con Michelle Soavi refugiado en la TV italiana y Darío Argento bastante perdido (a ver que tal el proyecto de la tercera madre). De esa producción italiana que ahora llega con cuentagotas encontramos esta película dirigida por el técnico en efectos especiales Sergio Stivaletti, con un título que homenajea una obra maestra de Mario Bava, y que parece más bien un muestrario de los maquillajes y trucajes de su estudio de f/x, siendo esto lo mejor de la película, ya que la fotografía (supongo que por el uso de cámaras digitales) parece de película porno y los actores son bastante limitados (exceptuando al veterano John Phillip Law). Desde luego, lo de Stivaletti no es la dirección y se dice que su anterior película, la recomendable "máscara de cera" fué casi toda dirigida por Argento. A destacar el cameo de Lamberto Bava interpretándose a si mismo en el rodaje (ficticio) de "Demons 7". En fin, un 5 pelado por los viejos tiempos de sangre y caspa.