Me encantó, para mi es sobre todo la historia de una amistad, de lo que la distancia y la vida le puede hacer a ésta, los diferentes caminos que tomamos, y cómo a pesar de todo, de perder cada uno por su lado, es posible rescatar algo...Tambien veo que es un retrato de una época de juventud que kitano trata con una cierta nostalgia...
Muy bonita. Supongo que Kitano juega un poco con la teoría del eterno retorno, y como dice Davis, reflexiona acerca de todo aquello que rodea nuestras decisiones. Es la única película suya en la que las decisiones de los protagonistas no son irrevocables. El final es muy poético, y no oculta la ternura del director hacia los dos personajes.