Genial recorrido por la carrera de Bob Dylan (al que admiro enormemente como poeta y músico), centrándose en los años más socialmente convulsos de la segunda mitad del siglo XX americana (y Europea, ciertamente). El montaje, las entrevistas, las imágenes escogidas apuntan a una labor de selección, combinación y orden realmente elogiable. El resultado no podía ser mejor. Una revisión apasionada y crítica de una época y su juventud, que fue la de Scorsese y que tuvo como expresión de sus valores claramente contrarios a los de las generaciones precedentes la música y letras de Dylan entre la de otros artistas. Por más que Bob lo niegue, él fue casi un gurú, menos panfletario que otros, menos obvio, artísticamente con más calidad...pero un gurú, al fin y al cabo. Bravo por Scorsese. Yo también espero ansioso el documental que prepara sobre otro titán, George Harrison.