Creo recordar (o puede que no) que fue Hitchcock o quizás Truffaut quién dijo que para aprender a dirigir una película había que verse 20 veces Un lugar en el sol. Una gran verdad ya que esta película es una lección de cine, baste ver la magistral secuencia del lago como ejemplo. Excelentes intepretacones de Winters (muuy secundaria por mucho que fuese nominada al Oscar como actriz) y Clift. La banda sonora y su tema principal son emblemáticos.
Una pelicula a revindicar, una joya injustamente olvidada. Todo en ella es perfecto y creible, romantico y fatalista. Poco mas se puede decir, excepto alentaros a los que no la hayais visto para que no se os ocurra perderosla. Mencion aparte merece un portentoso Montgomery Clift.