Excepcional. John Sayles empieza contando la vida cotidiana de sus personajes, los lleva a un paraje perdido y poco a poco vamos descubriendo sus secretos y sentimientos. Un viaje hacia el interior del trío protagonista y su manera de afrontar la vida. Y menudo final... Una verdadera incógnita, un broche perfecto para esta producción a contracorriente. Misteriosa, pausada y con cierto aliento fantástico. Soberbio, inmenso David Strathairn.