El jefe de urgencias del Chicago Memorial Hospital, el Dr. Joe Darrow (Kevin Costner) es un respetado experto en traumatología. Pero su dilatada experiencia profesional no le sirve de mucho cuando su mujer fallece trágicamente. Emily Darrow (Susanna Thompson), que también es médico, se encontraba en misión cuando falleció en accidente de autobús en una carretera de montaña de Venezuela. Seis meses después de su muerte, el cuerpo de Emily sigue sin aparecer y Joe no consigue superar el dolor por su pérdida. Entonces empieza a captar señales que parecen indicar que ella quiere comunicarse con él. Una extraña forma abstracta empieza a aparecer en todo lo que rodea a Joe. Parece decirle que debe mirar más allá de lo que tiene ante los ojos si quiere encontrar la respuesta a sus preguntas.
Crítica
Puntuación del crítico: 2
Un tostón de cuidado con un muy desaprovechado reparto. Considerado film de terror, en él lo único terrorífico es el muy mediocre guion, llevado con mucho aburrimiento. Durante la hora y media que dura la peli apensa pasa nada, niños que dicen cosas, hombre que les escucha, una misteriosa desaparición... y nada más. Y si ya en sí la película es sonrojante, se estropea aun más al llegar a un final simplemente patético, sin sentido, presuntamente emotivo pero que solo causa verguenza ajena. En fin, es una de las películas mas decepcionantes de los últimos años, algo así como "White Noise".
Isaías
Ficha de Película enviada por lobezno-extreme el 27 de Agosto de 2005
Inexplicable caida a los infiernos del otrora gran intérprete Kevin Costner -Bailando con lobos y Los intocables de Elliott Ness así lo confirman-. empeñado en querer demostrar que es un quiero y no puedo. De este film apático y desordenado poco merece ser destacado, ni tan siquiera a la buena de Kathy Bates, que no logra destacar en su papel de amiga protectora. Con un ritmo cansino y un guión que no logra afianzar la atmósfera de suspense pretendida, la película se convierte en una batería de diálogos lacrimógenos que no llevan a nada. Incluso la, en un principio, enigmática alegoría a la libélula se convierte finalmente en un sinsentido, dando lugar a un desenlace cuanto menos inverosímil por lo puro y simple. En definitiva, un nuevo fracaso que sumar a la ya de por si languideciente carrera (ni tan siquiera el físico juega a su favor) de Costner.